Fortaleza medieval de Muro de Roda, valle de La Fueva


"Las montañas más altas temen a los que andan despacio"

"Mas vale perder el tiempo con los amigos... que perder amigos con el tiempo...Por este dulce motivo, pierdo el tiempo contigo... porque NO quiero perderte con el tiempo, amigo"

Regresad vivos, regresad como amigos, llegad a la cumbre. Por ese orden (Roger Baxter-Jones).

viernes, 26 de agosto de 2011

Faja de la Pardina, Ordesa

Viernes, 26 de Agosto de 2011

Manuel ha vuelto de Madrid y me llama para preguntarme qué hacemos esta semana.
Le propongo hacer la Faja de la Pardina, esa olvidada y casi desconocida senda del Cañón de Añisclo.

Supongo que la proximidad de Ordesa y de sus espectaculares senderos colgados de las enormes paredes hacen que la masa de gente se dirija allí y no conozca tanto este sector, y nosotros diremos: mejor que mejor, pues hemos pasado el día completamente solos disfrutando de la Naturaleza y de unas vistas maravillosas.
Como siempre, hemos encontrado un bello rincón donde explayar nuestros ojos y airear nuestras mentes.

Si la salud me lo permite, es bien seguro que aquí volveré.


ACCESO: Desde Ainsa nos dirigimos a Escalona donde tomamos la carretera de Añisclo, en pésimo estado de conservación. Siguiendo el congosto, pasamos el aparcamiento de San Urbez y antes de la población de Fanlo tomaremos el desvío a Nerín, donde estacionamos junto al Hotel Palazio.

Con la mochila ya en los hombros seguimos la carretera y a pocos metros desviamos a la derecha por la pista de los Miradores de Ordesa, hasta la barrera que impide el paso a los truismos en verano. Salimos a la derecha (sendero muy pisado) por el conocido atajo que  nos deja más arriba evitando las revueltas del camino.

Llegamos al Cuello Arenas (1.900 m.), a la derecha tenemos el refugio del mismo nombre (cerrado), tras el cual parte la faja de La Pardina.




Al sur del refugio tenemos una curiosa sima vallada, y al este vemos las señales indicativas puestas recientemente. Nos hacemos la foto de "partida" a un "mundo desconocido", del cual apenas hay reseñas.
¿Cómo será esta faja?





Nada mas metrenos en el barranco encontramos otro cartel que indica al "Barranco de La Pardina" hacia abajo, que no tomamos puesto que nos llevaría al fondo del Cañón de Añisclo. Nosotros seguimos sin perder apenas altura hacia la Mallata Candón por la Faja.




Después de rodear el circo que tenemos ante nosotros, de espectacular belleza, bajamos a un  escalón inferior entre bastante maleza y muchas ortigas. Hay que llevar pantalón largo.








El sendero se adentra en el Barranco de La Pardina, afluente del río Bellos o Garganta de Añisclo.
La primera terraza ya nos da idea de lo espectacular que es esta ruta.




Curiosamente el extraplomo de la roca nos sirve de refugio, ya que llueve un poco. También el tiempo ayuda  a que parezca la aventura un poco más emocionante y salvaje.




No hay palabras para tanto que ver y disfrutar.





Una ligera cascada de agua brota de un agujero en la pared. Ambiente fresco y divertido.









La cornisa se estrecha lo suficiente para dar sensación de vacío sin sentir peligro ni miedo.




Al llegar a la confluencia entre el Barranco de La Pardina y el Cañón de Añisclo, se abre el valle y desde las alturas de este impresionante cañón se divisan los Sestrales. Arriba, los verdes prados suavizan el agreste paisaje y abajo la exuberante vegetación escala por las paredes hasta jugar exitosamente con la gravedad. Que bonito es ésto.









Rodeamos el último espolón por la cornisa y la senda se va hacia arriba bruscamente, buscando esta canal para salir a los prados superiores.




Un paso equipado con cadena nos ayuda a trepar, saliendo de la faja. Ya en mi casa, descubrí con sorpresa que se puede continuar la faja hasta el barranco de La Capradiza, si bien no vimos ninguna senda y sí mucha maleza en adelante. Para otra ocasión.




Más sirgas....




Incluso un tramo de ferrata, fácil y cómodo, para plantarnos en la Mallata Candón. No nos fueron necesarias ni cuerdas ni arnés, está muy bien arreglado. Sólo quien tenga temor a estas cosas puede llevarse algo de equipo adicional, como unas cintas planas y cordino para amarrarse a la sirga, con los conocimientos adecuados para ello, claro.




Estamos arriba y divisamos un amplio panorama.



Nos hacemos la "foto de cima"




Visitamos esta cabaña en perfecto estado.




Una florecilla....




Y volvemos por la parte superior, curiosa imagen en la que vemos la Faja debajo nuestro, es como haber hecho dos fajas superpuestas.




De regreso en Cuello Arenas nos pilla un chaparrón y aprovechamos a comer en el refugio, cerrado pero que almenos nos resguarda un poco.

Bella imagen bajando por la pista.  




Y fin de la jornada, nos vamos por la carretera de Buerba;  ahora va y se despeja, vemos el Cañon de Añisclo y su collado, con el Pico Punta de las Olas al fondo.

Una jornada estupenda que no olvidaremos.
¡Vaya con la Faja Pardina!


5 comentarios:

  1. Muy interesante el blog enorabuena. Esta ruta la intentare hacer me ha gustado mucho y ademas la tengo en la puerta de casa

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias para el descubrimiento de esta ruta.
    Fuimos con mi familia a la faja de la pardina este otono et fuimos encantados.
    Es un sitio maravilloso .

    Una enamorada de los pirineos.

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias!! Me alegro mucho, es un lugar muy bello y además, poco visitado.
    Un abrazo!! Santi.

    ResponderEliminar
  4. ¿En qué estado están esos refugios libres que comentas? Gracias

    ResponderEliminar

Haz un comentario a esta entrada