Sierra de San Quílez, Baells (Huesca), El Castellot, pozos de cal y Cuevas.

La comarca de La Litera, en la provincia de Huesca, está dividida orográficamente en dos mitades, la Litera Baja en la que abundan los cultivos agrícolas y se agrupa la mayor parte de la población y la Alta Litera, mucho menos poblada, cuya superficie más montañosa está mayoritariamente cubierta de vegetación mediterránea compuesta por carrascas, robles, enebros, sabinas, y toda una multitud de pequeñas plantas. Además, claro está, de cultivos principalmente de cereal y alguna explotación ganadera. 

Pero lo que hoy en día parece una tierra pobre, antaño no lo era tanto puesto que en ella se producía aceite, frutos secos, plantas medicinales, cal, leña e incluso hielo.  También la caza era una fuente de alimento muy importante. 

La modernización de los cultivos y de la vida, ha dejado un poco de lado esta mitad de comarca, que poco a poco parece resurgir de sus cenizas aportando sus reliquias a quienes ansían volver a disfrutar de la vida como antaño. 

Personalmente mis sentimientos están muy cercanos a estas tierras, me siento parte de estos montes, su rusticidad me impregna y no dejo de sorprenderme de lo que esta tierra nos da, aunque nosotros ya no sepamos aprovechar estos recursos. Ojalá que un día nos demos cuenta de lo importante que es saber entender y valorar lo que nuestros antepasados hacían aquí. 

Bueno, este rollo viene a cuento de que he vuelto a Zurita, a pasear y a airear mis pulmones. Antaño venía aquí a buscar agua fresca para  mi hogar, hace un par de años hicimos con el Club Montisonense una hermosa andada visitando los pozos de hielo y ahora vuelvo a preparar otra excursión, la subida a la sierra de San Quílez que con sus 1.084 m. es el punto más alto de la Comarca. 

Acceso: Uff, toca pisar pista de tierra. De Monzón voy a Binéfar y Tamarite de Litera, la Capital Cultural de la comarca y antaño de toda ella. De tamarite subimos hacia Alcampel enlazamos con la N-230 hasta el cruce de Baells, entramos en este pueblo que rebasamos y "ya" pisamos tierra con el coche. No es problema, ya que la pista está en muy buen estado, segumos las indicaciones de los postes de senderos hasta el nucleo prácticamente deshabitado de Zurita. 

Existe en este pueblo una vivienda de turismo rural "Casa Montañés", alguna granja, y allí mismo hay una importante zona de escalada, unmontón de vías que últimamente están muy frecuentadas. 

11,25 h. - Aparco en la entrada del pueblo y tomo rumbo al sureste, es decir que andando deshago los últimos 200 m. de pista hasta unos carteles informativos. Por cierto, que están re-señalizando los senderos, una grandísima noticia. Y también están limpiándolos a conciencia, de modo que empiezo a subir por la difusa senda que pasa bajo unos robles hasta encontrar una pista. Sólo hay que seguir las balizas de PR, nuevecitas aunque no demasiado abundantes.  

Pasamos una pequeña balsa junto a unas carrascas. 

Enlazamos con una pista, atención que no es la única, seguir siempre las señales amarilla y blanca de PR, (a veces verde y amarilla). Enfrente, está la montaña de San Quílez, todavía lejana.

Nuevo poste indicador, que nos manda de la pista que tira para el norte,  a la senda hacia el este. Limpia de vegetación, es agradable hacer la ruta porque aunque no lo parezca desde lejos, esta sierra tiene algunos rincones de tupido matorral e incluso bosque. 

Rodeamos este campo en donde no llegaron a recoger la paja. Otra vez por pista...

Un poco mas adelante, emerge una curiosa roca...

12,15 h. - Encontraremos un nuevo cruce donde dejamos la pista (Que vuelve a Baells) para ir directamente hacia la "peña", que se llama "El Castellot", esto es completamente nuevo para mí, no esperaba...

...¡que hubiera una ferrata para subir a esta roca de 25 m. de altura!

Ohh!! que bien! Decido subir hacia arriba a ver que tal está equipada. 

Primer tramo, encajado en una pequeña brecha. 

Pasamos por esta oquedad...

Un flanqueo algo espuesto

Nueva trepada con tres escaleras perfectamente ancladas.

Otro flanqueo por la cara sureste (izquierda) aún más expuesto pero cómodo. 

Ahí esta, después de pasarlo. 

La última trepada es algo más difícil por estar algo extraplomada, pero solo es un metro y medio. 

Últimos metros....

¡Coseguido! ¡¡Ferrata del Castellot!!

Desciendo con las lógicas precauciones, pero sin dificultad importante para mí. Es muy aconsejable llevar el equipo de ferrata, por supuesto. Por no decir obligatorio. 

A medida que nos alejamos de esta preciosa roca, las perspectivas cambian dando como resultado curiosas y variadas siluetas.

Continuamos la senda hasta los pozos de cal (hay dos separados de unos cientos de metros) conde se cocían las piedras para producir cal viva. Están muy bien, y es la primera vez en la vida que recuerde, que he podido ver unos pozos tan bien conservados. 

Primer pozo:

La senda, perfectamente limpia y cómoda...

Segundo pozo

La senda continúa, pero este tramo ya no es tan aconsejable para el senderista. No está tan limpio, tiene varios sube - baja que se hacen muy cansinos, y para subir a la sierra de San Quílez hay que trepar con fuerza un buen rato; sería mejor darse la vuelta y subir por donde dejamos al principio la pista, antes del Castellot. 

En mi caso quiero explorar esa ladera tan inclinada, bordeo la pared de caliza....

paso junto a este carrascal tan bonito...

Y trepando con ganas, sudando la gota gorda, voy progresando ganándole el pulso a la montaña. 

¡Vaya esfuerzo, ni que fuera esto alpinismo!

13,05 h. - Alto de la Sierra de San Quílez, vértice geodésico y preciosa ermita que en su parte trasera dispone de un refugio muy grande con hogaril incluido. Por lo que he podido leer era la casa del ermitaño. 

Los buitres sobrevuelan la montaña mientras yo me como unos dulces. 

Un rato sentadito al sol recargando energías que en Monzón hay mucha niebla,  hasta que decido ir regresando por la pista de Castillo del Pla, que desciende al oeste. 

En 2006 hubo un incendio muy importante, han pasado casi 8 años y las carrascas se han regenerado casi completamente gracias al poder de rebrote de estas plantas. Lo mismo ocurre con el boj, no así con los enebros y sabinas que han muerto y tendrán que ganarse el puesto a base de semillas de otras plantas que no se quemaron. 

Bajando por la pista encontraremos un cartel que nos orienta hacia las cuevas de La Guitarra....

y del Aire. No parecen visitables por dentro sin material específico, pero lo tomaré como un lugar interesante y un rincón bonito. 

Regreso a la pista principal sin volver atrás, pasando una antigua senda. 

Existe un muladar donde dan de comer a decenas de buitres, con razón no querían mis mantecados. 

La brisa del sur no me favorece, así que echo a correr un rato, fffff!!

El día está turbio e impide ver el Pirineo, pero sí el Sol, una de las habituales bondades de esta montaña. 

Encuentro un cruce de pistas, es el momento de tomar la de regreso a Zurita que, por cierto, está siendo reparada, ¡¡parece una carretera!!

Se está acabando la excursión, llegando a las rocas de Zurita. 

Barranco de Pulses, que precede al Barranco de Getsemaní. Naturaleza verde en verano, tostada en otoño, floreada en primavera. 

Primeras casas....

Iglesia de Zurita. 

Al fin!! he llegado. 

Pensaba que sería mucho más sencilla esta excursión, me ha sorprendido gratamente y me ha demostrado una vez mas. que en nuestro pre-Pirineo hay mucho, mucho por ver y disfrutar. 

¡Hasta la próxima!

Enlace al Track de GPS:  Clic Aquí

Distancia: 10,64 km.  Desnivel acumulado: 552 m.

Dificultad técnica:  Difícil (senderismo)

Tiempo: 3 horas 26 minutos

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